El uso de animales de laboratorio en la ciencia médica no sólo
es un problema ético, sino que los hallazgos de la investigación a menudo no
coinciden con lo que sucede en los seres humanos. La simulación de diversos
procesos naturales dentro de dispositivos microfluídicos a menudo proporciona
una técnica de laboratorio más confiable y más fácil de trabajar con animales
vivos.
Los investigadores de la Universidad de Purdue han
construido un dispositivo microfluídico que les ayudará a comprender la
relación entre los coágulos de sangre y los tumores pancreáticos. El cáncer de
páncreas parece conducir a una mayor formación de coágulos, lo que puede ser un
factor importante en la capacidad de este cáncer para crecer y diseminarse
rápidamente por todo el cuerpo. Además, los coágulos dificultan que los
medicamentos alcancen los tumores.
Los Purdue esperan que el conocimiento que reúnan con ellos
los ayude a los equipos asociados en el Hospital Infantil de Cincinnati, la
Escuela de Medicina de la Universidad de Indiana y la Escuela de Medicina de la
Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, a desarrollar nuevas terapias
para tratar el cáncer de páncreas.
Su nuevo dispositivo de microfluidos tiene túneles que
albergan diminutos trozos de tejido del conducto pancreático vivo, ubicados
debajo de un microslide. El tejido puede controlarse de cerca y cambiar el
entorno para evaluar cómo responde el tejido a diferentes estímulos.
Se utilizará tanto con tejido animal como con muestras
humanas enfermas para confirmar finalmente que se está desempeñando como se
desea y para comenzar a pensar en nuevos enfoques terapéuticos.