Ha habido una variedad de exoesqueletos y exosuits
desarrollados durante la última década que más o menos ayudan con la
rehabilitación y ayudan a los trabajadores a realizar tareas pesadas. Sin
embargo, mejorar las habilidades para caminar y correr con un solo sistema ha
sido un desafío debido a las diferencias en la marcha entre caminar y correr. Investigadores
de Harvard y la Universidad de Nebraska Omaha han desarrollado un exosuit que
hace que caminar y correr sea más fácil, permitiendo movimientos naturales y
altamente eficientes a diferentes velocidades.
Alimentado por baterías incorporadas y con un peso de solo 5
kg (11 lb), el suave exosuit se usa alrededor de la cintura y los muslos, con
el controlador colgado en la parte posterior. Puede detectar si el usuario está
caminando y corriendo y puede hacer una transición casi imperceptible entre los
dos. Funciona aplicando fuerza de tracción entre la cintura y los muslos usando
poleas de cable.
Estudiándolo en una cinta de correr, los investigadores
mostraron que el dispositivo reduce las tasas metabólicas de caminar en un 9.3%
y de correr en un 4% en comparación con no usar el exosuit. Al aire libre,
ayudó a caminar a diferentes pendientes y en una variedad de entornos y
velocidades. Los investigadores señalan que la reducción metabólica no es
gigante, pero que el primer prototipo es realmente una prueba de concepto, y
los avances adicionales podrían conducir a ganancias aún más significativas.
Si bien el nuevo dispositivo se desarrolló con la ayuda del
Pentágono para mejorar las capacidades de lucha de guerra, puede terminar
haciendo más para las personas con problemas para caminar y correr.